El botón antipánico divide las aguas en el movimiento feminista

El sistema de botón antipánico fue presentado en las últimas horas en Paraná. Se trata de una aplicación que se opera a través de un celular, y que tiende a la prevención de situaciones de violencia de género. Si bien todos los movimientos ligados al feminismo y al combate de la violencia machista consideran que no es lo único que se puede hacer, un punto divide las aguas: una parte cree directamente que no sirve.

SILVINA CALVEYRA – RED ALERTA

“La medida es un avance, teniendo en cuenta que el botón era parte del proyecto integral que presentamos como institución en la Legislatura. Implica prevención, que es importante, teniendo en cuenta que comenzamos el año con altas estadísticas de femicidios, de los cuales tres ya en la provincia” explicó Silvina Calveyra, titular de Red Alerta.

La militante de género destacó que también es preciso que se implemente la pulsera para el victimario, de modo de no estigmatizar a la víctima: “Debe ser una medida provincial y universal, porque no solo afecta a las grandes ciudades, sino que está invisibilizado en pequeñas localidades y zonas rurales. Sera una herramienta que con el tiempo se irá perfeccionando. Hay que contemplar además que mucha veces te podés quedar sin batería o en efecto no tener un celular acorde a la tecnologia necesaria”.

Asimismo la titular de Red Alerta subrayó que “la base de la violencia no pasa por un dispositivo, sino que pasa por la transformación en cuanto a esta matriz patriarcal que nos afecta fuertemente. En eso debemos trabajar, no sólo en la familia sino que en todos los efectores. Porque nos matan por ser mujeres. Debemos estar acompañadas de medidas que no deben ser garantistas para victimarios, sobre todo en situaciones de abusos, cuando sabemos que reinciden y son irrecuperables”.

NADIA BURGOS – JUNTAS Y A LA IZQUIERDA

“El botón antipánico no es una solución a la violencia de género, porque no se puede dejar la situación en manos de la mujer. El Estado quiere la mujer se haga cargo de la situación cuando va a ser violentada. Es ineficaz, está demostrado. Cuando presiona el botón el ataque es inminente, con lo cual depende de la celeridad de los operativos para llegar al lugar y generalmente como hablamos de un control de instituciones machistas, como la Policía, tardan en llegar” explicó Nadia Burgos, militante de la agrupación Juntas y a la Izquierda.

Burgos fue tajante a la hora de hablar del dispositivo: “No sirve, es obsoleto. Como medida preventiva debería implementarse la tobillera electrónica, porque ahí se controla al violento. La violencia sólo se termina con políticas integrales, y esto es emergencia en materia de violencia de género, presupuesto real, subsidios habitacionales, asistencia médica y laboral, tratamiento para los hijos y otras medidas que permitan colaborar con la situación de la mujer violentada”.

Para finalizar, la militante de Juntas y a la Izquierda puso de relieve que, en caso de avanzar con una medida como la tobillera electrónica, es necesario que sea con control social: “De instituciones, agrupaciones y familiares de víctimas. No sirve que controlen la herramienta las mismas organizaciones machistas y patriarcales que fomentan la violencia de género constantemente”.