«Que me perdonen», dijo el acusado de la masacre de Hurlingham

Diego Loscalzo viajaba sin bolsos y se lo veía nervioso. En cada parada, bajaba para ir al baño, según contó una mujer que viajaba en el mismo micro. Lo acusan de matar a cinco personas en Hurlingham, entre ellos su expareja.

Subió al colectivo sin bolso y se sentó en el asiento número 13. Cuando la Policía paró la unidad para controlarla, ya en Córdoba, se metió en el baño. «No me peguen», gritó el acusado de la masacre en Hurlingham cuando los oficiales lo detuvieron. «Que me perdón», pedía a los gritos mientras lo subían al patrullero.

Diego Loscalzo, acusado de haber asesinado a su exesposa y a otras cuatro personas en la localidad bonaerense de Hurlingham, fue detenido este lunes en la localidad de Río Segundo.

El chofer del colectivo Chevallier señaló a La Voz que Loscalzo subió en Buenos Aires. Dijo que le llamó la atención que no llevara ningún bolso, ni siquiera pequeño, para un viaje hasta Córdoba. «Venía con lo puesto», indicó. También apuntó que aunque no lo reconoció, observó que actuaba con nerviosismo tanto al subir al ómnibus en Buenos Aires como en cada parada.

Una mujer que viajaba en el colectivo contó que cuando la Policía paró la unidad y la sometió a control, sobre la autopista, Loscalzo se metió en el baño de la unidad. «Yo le avisé a la Policía que había alguien en el baño que me parecía muy nervioso», indicó.

Andrea fue la pasajera que se sentó a su lado en parte del viaje, hasta su detención. «Siempre vino como durmiendo y se tapaba con una campera de cuero, se la tiraba encima, y se bajaba al baño en cada parada. Cuando el colectivo paró por el control policial, me pidió que lo deje pasar al baño y salió muy apurado. Yo viajé desde Leones hasta acá. Cuando me subí, él estaba ahí. No habló por teléfono con nadie. Tampoco me lo imaginé como sospechoso ni nada», contó a La Voz.

Los crímenes

Loscalzo está acusado de matar a su exmujer, la agente de policía Romina Maguna; a los hermanos de la mujer, Vanesa y José Maguna; a la madre de los tres, Juana Paiva, y a Darío Daniel Díaz, pareja de Vanesa.

Se conoce como femicidio vinculado a los crímenes cometidos por un hombre con la intención de castigar o dañar a una mujer, o bien porque estas personas quedan en la línea de fuego durante un ataque femicida.