Amenazas de UPCN en Diamante, nadie va a la cárcel
La Justicia absolvió al ex ministro de Salud y a dirigentes gremiales procesados por «coacciones agravadas». No obstante, hubo tres condenas mínimas, a cumplir de manera condicional.
La Justicia absolvió este martes al exministro de Salud, Ariel de la Rosa, uno de los procesados en el juicio por amenazas de dirigentes de UPCN -Unión del Personal Civil de la Nación- hacia la directora de la Colonia de Salud Mental de Diamante, Noelia Trossero, hechos ocurridos entre el 5 y 7 de junio de 2017. Los delitos investigados fueron «coacciones agravadas», por un lado, y «resistencia a la autoridad», por el otro.
El Tribunal absolvió también a Carina Domínguez, secretaria Gremial de UPCN; Zunilda Suárez y Guillermo Barreira. Para este último, la Fiscalía no había presentado cargos.
No obstante, José Zarza y Noemí Santamaría fueron a condenados a dos años de prisión condicional por el delito de «coacciones simples» y Fabián Monzón, secretario Adjunto del gremio y ex director del Iosper, a un año de condicional por «resistencia a la autoridad».
De esta manera, ninguno de los procesados en la causa irá a la cárcel.
El Ministerio Público había pedido cinco años de prisión efectiva contra el exfuncionario provincial, en tanto que para los dirigentes gremiales el pedido fue de cinco condenas y una absolución: José Zarza(cinco años y seis meses), Noemí Santamaría(cinco años) y para la secretaria gremial del sindicato Carina Domínguez(cinco años).
Para Zunilda Suárez, por su parte, la solicitud fue de tres años y seis meses de prisión, mientras que para Fabián Monzón, secretario adjunto y exdirector del Iosper, la pena solicitada fue de un año y seis meses de prisión condicional. Guillermo Barreira, en tanto, recibió un pedido de absolución.
La causa investigó los hechos ocurridos entre el 5 y el 7 de junio de 2017 en el nosocomio diamantino, donde la directora de la institución habría sido amenazada por dirigentes del gremio que actuaron de manera coordinada con el entonces titular de la cartera sanitaria. El problema se desencadenó con la baja de una enfermera, Yanina Migueles, cuya reincorporación fue solicitada de manera coercitiva por el gremio y contó con el posterior aval del entonces ministro, de cercanía política con UPCN.
El ex funcionario, puntualmente, habría mantenido una conversación telefónica en tono amenazante con Trossero, antes de la visita de los dirigentes gremiales que ese miércoles 7 de junio terminaron detenidos. Paralelamente, De la Rosa emitió una resolución ministerial que ordenaba la reincorporación de Migueles, aunque dos días después terminó presentando la renuncia en medio del escándalo que desató el caso.
Para los fiscales, hubo una «actuación conjunta» entre el ex ministro y los dirigentes que acudieron a Diamante, quienes querían demostrar como «un triunfo político» el aval de De la Rosa a la trabajadora despedida. En esa línea, sostuvieron que los actos de «patoterismo, intimidación y apriete» estuvieron acreditados durante el debate, y pidieron además que se valore la posible presencia del delito de violencia de género contra Trossero.
Fuente: Ahora